Las catequinas del té verde, evaluadas por la EFSA

Fabricante a terceros de suplementos alimenticios

El té verde (Camelia sinensis L. Kuntze) ha estado en el punto de mira por parte de la EFSA debido a la preocupación de países nórdicos por la aparición de casos de daño hepático, posiblemente asociado al consumo de extracto de té verde, lo que ha concluido en una petición por parte de la Comisión Europea a realizar una revisión de la seguridad del ingrediente.

El té verde tiene una serie de compuestos activos, entre ellos las catequinas, donde destacan la epicatequina (CE), catequina epigalato (EGC), galato de epicatequina (ECG) y galato de epigalocatequina (EGCG). Ésta última, ha sido objeto de estudio por parte de la EFSA, debido a las dosis presentes en los extractos de té verde. El consumo de EGCG en tés se encuentra en un rango entre los 90-300 mg día, pudiendo llegar a 866 mg, mientras que en los suplementos a partir de extractos se pueden ingerir hasta 1000 mg EGCG/día.

La EFSA ha establecido que las dosis habituales, hasta 300 mg, son seguras y por tanto no hay problemas asociados a su consumo. En cambio, se han identificado que a partir de 800 mg de EGCG/día se observa un incremento de las transaminasas séricas. La dosis intermedia, de 300-800 mg EGCG/día, solo presenta un caso de alteración hepática registrado. Aun así, no hay suficientes estudios científicos para establecer qué dosis de EGCG es segura en complementos a partir de extractos de té verde.

Por ello, la ESFA propone realizar estudios para establecer una relación de dosis-respuesta de hepatotoxicidad y poder ajustar las dosis recomendadas. También recomienda que en el etiquetado se informe al consumidor del nivel de catequinas y de la proporción de galato de epigalocatequina (EGCG).

De momento, la Comisión Europea no ha establecido ningún cambio en la normativa, no obstante, es cuestión de tiempo que se emita alguna novedad al respecto.