Suplementos para unas fiestas sin culpa

Por el momento, no existen pastillas mágicas que permitan comer sin ganar peso, pero si hay suplementos alimenticios que pueden ayudar a controlarlo, especialmente en situaciones de comidas excesivas. Estos suplementos naturales actúan a través de diferentes mecanismos, como el aumento de la saciedad, la aceleración del metabolismo y la regulación del azúcar en sangre.

Uno de los componentes clave es la proteína faseolamina, que proviene de la planta Phaseolus vulgaris. Esta proteína actúa principalmente como un inhibidor de alfa-amilasa, una enzima que descompone los carbohidratos en azúcares simples. Al bloquear la absorción de carbohidratos, la faseolamina obliga a las células a recurrir a las reservas de grasa para obtener energía, lo que puede reducir la cantidad de calorías que el cuerpo obtiene de los alimentos. Además, la faseolamina puede ayudar a estabilizar los niveles de glucosa en sangre, reduciendo los picos de insulina, que a menudo están relacionados con el almacenamiento de grasa y el aumento del apetito.

Otro ingrediente que actúa como controlador de la saciedad es el glucomanano. Una fibra soluble extraída de la raíz de konjac (Amorphophallus konjak), con alta capacidad de absorción de agua. Esta fibra forma un gel espeso en nuestro estómago, lo que puede aumentar la sensación de saciedad y, por lo tanto, reducir el apetito.

El extracto de té verde (Camellia sinensis), un extracto muy conocido en complementos alimenticios rico en catequinas. Proporciona propiedades antioxidantes, ayuda a aumentar el metabolismo y a mejorar la sensibilidad a la insulina. Su efectividad se potencia durante el ejercicio, ya que las catequinas aumentan la termogénesis, el proceso por el cual el cuerpo quema calorías para producir la energía.

Otra planta reconocida por sus propiedades depurativas, especialmente beneficiosas para la salud del hígado es el cardo mariano (Silybum marianum). Después de comidas excesivas, su componente activo, la silimarina, ayuda a aliviar la sensación de pesadez y favorecer la digestión, ya que estimula la producción de bilis, lo que facilita la digestión de las grasas.

Por otro lado, el diente de león (Taraxacum officinale) proporciona propiedades diuréticas y tiene capacidad para estimular la función hepática. Es una planta rica en nutrientes, y contiene varios principios activos como taraxacina, inulina, ácidos fenólicos, saponinas y betacarotenos, que contribuyen a la eliminación de toxinas del cuerpo, a la protección del estrés oxidativo y a reducir la inflamación.

Es importante recordar que nuestra fuente principal de energía son los carbohidratos, y que al igual que las proteínas y las grasas, son macronutrientes esenciales que el cuerpo necesita para funcionar correctamente. El problema surge cuando se consumen en exceso, pero esto no significa que los carbohidratos en sí sean «malos».

La clave para una buena salud radica en la moderación y en la calidad de los alimentos que elegimos. Aunque los suplementos no son una solución mágica, en Lleó siempre recomendamos las opciones más fiables y eficaces para contribuir a nuestro bienestar.